Nos cansamos de justificar. |
Mientras ella me contaba como su pareja era indiferente con ella, desatento y con una actitud de que nada le importaba, empecé a preguntarle a manera de entender “la otra parte” algunas virtudes de su pareja. No pudo responder y fue cuando entendí lo que dijo Pablo: Si alguna virtud hay, en eso pensad.
Nada fácil. Pero necesario para salvar una relación. Como humanos nos cansamos de amar, de esperar, de soñar. Nos cansamos de justificar. Y todo lo vemos a través del prisma de nuestra situación. Cuando le pregunte a esta persona si ella creía que necesitaba cambiar algo me dijo que no, que lo que tenía que cambiar ya lo había hecho hace mucho tiempo.
No pude más que quedarme callado y meditar en qué áreas yo estaba actuado de manera similar. En que áreas estaba justificándome y condenando a los demás. Que gran lección me dio esa conversación.
Aprendí a:
- Celebrar las cualidades de los que me rodean para…
- Mantenerlas presentes en mi mente para cuando tenga que hacer memoria
- Buscar algo en mi que deba cambiar
- No dejar pasar los problemas sin resolverlos
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